Es innegable que el mundo ha estado afrontando una de las crisis mas trascendentales en su historia y que las consecuencias de la pandemia apenas empiezan a ser analizadas, pues no podemos afirmar que ha finalizado. Hemos vivido una división en la historia, ya que después de afrontar la Revolución 4.0, que impuso un desarrollo tecnológico que se iba cumpliendo bajo determinados esquemas y programación, ese desarrollo tecnológico hubo que acelerarlo con el aislamiento preventivo obligatorio decretado por los gobiernos, única forma de evitar el contagio junto con las medidas biosanitarias de cuidado personal. Las formas de trabajo que venían utilizando las tecnologías, el teletrabajo, trabajo remoto, en casa o a distancia fueron las herramientas para salvar puestos de trabajo y empresas, pero plantea muchos retos y situaciones que se desprenden precisamente de esas nuevas modalidades y que tocan con la salud y seguridad en el trabajo y que confluyeron en el hogar una serie de actividades que utilizando la tecnología, pero igualmente con grandes incidencias en la salud del trabajador que deben atenderse de manera adecuada. Los retos que se plantean para el derecho del trabajo, ante nuevas formas de trabajo y condiciones laborales no reguladas, llevan necesariamente a pensar en la construcción de un nuevo derecho del trabajo que regule situaciones nuevas y para un mundo que cambio de manera sustancial, no solo por la pandemia sino por fenómenos como la globalización, internacionalización de las empresas, la tercerización, fenómenos demográficos como las migraciones, el envejecimiento poblacional y las bajas tasas de natalidad, venían señalando que las normas laborales habían quedado desuetas frente al siglo XXI. Consecuencialmente la Seguridad Social con más de un siglo de creación, íntimamente ligada al concepto de relación laboral, revaluada en las nuevas formas de trabajo, con lo cual el sistema contributivo que le sirvió de base se ha visto muy afectado. Estas y la necesidad de analizar el futuro del trabajo frente a los instrumentos internacionales promulgados por la OIT en la celebración del Primer Centenario de existencia, nos llevaron a considerar que es necesario reunirnos a través de los diferentes temas planteados para los Paneles, para con la contribución de especialistas de mas de 25 países y buscando la innovación en la nomina de Conferencistas Invitados, que nos compartan sus propias visiones frente a los temas planteados a consideración en este Primer Congreso Mundial con el cual ILTRAS inaugura esta modalidad después de venir desarrollando los IBEROAMERICANOS Y EUROPEOS en la VIII edición del mes de octubre pasado.
Estamos seguros que la inclusión de nuevos países que no habían sido invitados con anterioridad da precisamente ese carácter universal, ampliando la visión del mundo del trabajo y de la seguridad social. La misma OIT plantea en su Informe la necesidad de nuevas organizaciones de empleadores y trabajadores lo que indica claramente que allí también es preciso innovar frente a los grandes cambios en el mundo del trabajo la forma de realizarlo y ofertarlo y la transformación de las empresas donde prima el servicio a través de plataformas. El ILTRAS ha iniciado una nueva etapa contando con el apoyo del Dr. Juan Francisco Solorio Cardiel y su equipo administrativo y logístico, brazo del cual carecía el INSTITUTO LATINOAMERICANO DE DERECHO DEL TRABAJO Y DE LA SEGURIDAD SOCIAL. Contando con la colaboración del Administrador Julio Cesar Gutiérrez Batalla, como Secretario Ejecutivo y Tesorería, dotamos nuestra organización de ese brazo administrativo y logístico del cual carecía para iniciar esa nueva etapa actualizando la pagina web que puede ser consultada y divulgada como órgano informativo del ILTRAS y además del Congreso y un Boletín mensual esperando contar con la colaboración de nuestros miembros actuales y futuros. Hemos diseñado un soporte en los diferentes países con Coordinadores que promuevan y divulguen las actividades del ILTRAS, para que trasciendan conforme su importancia. Los expresidentes que en número de 6 aun viven por fortuna, han sido convocados para rendirles justo homenaje a la labor que realizaron en su tiempo de gestión, pretendemos acercarlos nuevamente a su institución a través del Consejo Consultivo. Queremos aprovechar su experiencia y además expresar la gratitud por la gestión que adelantaron. Las organizaciones tienen que innovarse y ante todo ponerse a la altura del mundo actual mucho mas dinámico y presente en el mundo del derecho del trabajo y de la seguridad social en su eminente actividad académica que lo ha caracterizado desde su fundación en 1967 por el Dr. Mariano Tissenbaum. Esa actividad académica ha sido su sello y debe continuar siendo el faro inspirador hacia el futuro. MARTHA ELISA MONSALVE CUELLAR
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